26 ago 2018

Re-descubriendo tu ciclo menstrual



Según la RAE —nótese de nuevo la RAE super actualizada— menstruo significa: "sangre procedente de la matriz que todos los meses evacuan naturalmente las mujeres y las hembras de ciertos animales". Lo primero que hay que decir sobre esto es que no todas las mujeres menstrúan ni toda persona que menstrúa es una mujer. En segundo lugar, ¡vaya calidad de información! No sé cuántos dichosos clicks he tenido que hacer para encontrar esta definición, ya que para menstruación nos hace alusión a "menstruo". Si buscamos en Wikipedia encontramos lo siguiente: "La menstruación, también llamada periodo o regla, es el sangrado que experimentan las mujeres y algunas hembras mamíferas cuando el óvulo, que se expulsa del ovario para ser fecundado, no se fertiliza. Se produce en la última fase del ciclo menstrual, llamada fase postovulatoria, cuando se desprende el endometrio, que se había ido engrosando como preparación para recibir, implantar y nutrir al óvulo fecundado. En total, el flujo de una menstruación es de entre 40 y 50 mL. Está compuesto de sangre, tejido endometrial y otros fluidos vaginales. Este fluido sale por la vagina, durante un promedio de entre tres y siete días".

¿Qué es realmente el ciclo menstrual? El ciclo menstrual es un proceso que ocurre en el cuerpo dirigido hacia un posible embarazo. Si este embarazo no sucede, entonces aparece la menstruación o comúnmente conocida como regla. Lo primero a aclarar y al contrario de lo que mucha gente piensa, la menstruación no es solo la regla, sino que es todo un ciclo, es todo un baile hormonal de duración media de 28 días, que no 5.

El ciclo menstrual consta de cuatro fases con características diferentes. No es mi objetivo daros la charla de qué pasa en cada una de ellas. Si queréis más info sobre esto podéis consultar aquí, aquí y aquí. Para resumir podemos decir que las cuatro fases son: menstruación, pre-ovulación, ovulación y pre-menstruación —me está encantando cómo blogger me pone las palabras subrayadas en rojo porque no las conoce—. En la primera fase es cuando nos encontramos con la menstruación que dura entre 3 y 7 días, y en la tercera fase sucede la ovulación, es decir, el periodo fértil.

El principal problema que he visto/veo con el ciclo menstrual es que no se conoce. He tenido que explicarle que existen cuatro fases a mi mejor amiga porque ella no era consciente de ello. Durante el colegio se enseña pero de forma muy básica y masculinizada. Solo se muestra que sirve para concebir bebés y poco más. Nada de que podemos saber la fase en la que nos encontramos por nuestra energía, la temperatura basal, el flujo vaginal, etc. Y lo que menos nos enseñan aún es que podemos organizarnos según en qué fase nos encontramos, porque claro, eso no interesa. Al contrario que esto, lo que sí nos enseñan es que es algo por lo que tener asco. Recuerdo que mi madre no me dejaba ducharme con ella cuando tenia 5 años porque creía que me iba a asustar. Ah sí, ya sabemos todos que es algo inhumano, antinatural y un fluido que huele horrible y es asqueroso. 

Mis primeros recuerdos sobre la menstruación creo que marcaron mi pensamiento sobre ella hasta hace unos 5 meses, y supongo y entiendo que esto le pasará a más personas. Empezando por que mi madre me la ocultaba, y siguiendo por que cuando se iba acercando la hora de mi primera regla —menarquia— la gente me decía que cómo podía tener ganas de que viniera, si es asquerosa y un coñazo. Como si todo el ciclo fuese la regla. Cuando entré en el instituto mis amigas empezaban a apuntar con el dedo a quienes ellas creían que ya habían tenido la menarquia, era algo así como vergonzoso. Además, recuerdo exactamente como una de ellas me dijo que me acercara para preguntarme si me había venido, y cuando dije que no, empezó a llamarme mentirosa. Su método para saberlo era infalible, según ella. Después de esto te encontrabas con un problema cada vez que querías ir al baño, porque como llevaras algo más que tus manos vacías ya era como un "¡mira a aquella que tiene la regla!". Eso si te dejaban ir al baño, porque a veces los profesores no entendían que existe la menstruación. Como siempre, ocultada. Cuando vino por primera vez, a los 12 años, recuerdo que tenía que ir contándolo a toda la familia porque sino se enfadaban. Como si después de todo lo que me habían criticado la regla yo tuviese ganas de ir publicitándolo por ahí. "Oye tú, que ya tengo la regla". De verdad que yo espero que estas cosas no sigan pasando porque me mato aquí mismo. Todas estas cosas, que parecen una tontería a simple vista, van marcando la opinión que tienes de ti misma, porque el ciclo menstrual eres tú, y al final nos encontramos con que nos creemos que es normal que duela muchísimo, que venimos al mundo a sufrir dolores, y cada vez que baja suspiramos de horror. Pues no, señoras y señores, esto NO es el ciclo menstrual.

Gracias a un vídeo de Los Libros de María Antonieta (aquí para verlo) empecé a cuestionarme si en realidad todo este fantasma perseguidor de la regla era cierto y me encontré con que NO LO ES. Yo por aquel entonces tomaba la píldora anticonceptiva desde hacía bastante tiempo y lo primero que hice fue pensar en si merecía la pena después de conocer los efectos secundarios que sí estaba notando en mí pero ni me había dado cuenta. Así fue como le dije adiós a la pastilla y empecé a vivir mi ciclo menstrual desde cero. He notado muchas cosas y la mayoría de ellas son difíciles de explicar, pero voy a intentarlo. Lo primero que noté fue que no me dolía casi. Es decir, quizá un poco de molestia en el día 1 o el día 2, nada más y nada que no pudiese aguantar o hacer mi vida normal. He re-descubierto, además, mi ciclo menstrual, me explico: con la píldora no notaba absolutamente ninguna fase —tampoco existen—, y desde que la dejé vivo cada fase y la aprovecho. Si sé que tengo que tomar una decisión me espero a la fase pre-menstrual o a la fase menstrual. Cuando estoy en la tercera fase —ovulación— necesito soltar lo que siento por personas y dar amor. Y en la segunda fase puedo correrte una maratón si quieres. La que más utilizo es la última fase —pre-menstrual—, porque es cuando estoy más creativa y necesito soltarlo. Aunque he de decir que me noto más creativa en general, destacando en esa fase.  

Para llevar a cabo mi organización menstrual he probado con varias apps, pero me quedo con LUNAR debido a que no está constantemente pidiéndote que insertes datos del día, solo escribo lo que quiero y cuando quiero. Además te da consejos, a veces prácticos y otras veces más místicos que me encantan. También utilizo un cuaderno personal donde voy apuntando las fechas donde viene, se va, síntomas a destacar, cosas que quiero escribir porque me sale de los ovarios —nunca mejor dicho—, dibujo si me hace falta o maldigo a alguien si así lo necesito. Existen otras apps como Clue o Flo que he probado y me parecen buenas, pero piden constantemente que metas el tipo de flujo, cantidad de sangre, deseo sexual, relaciones sexuales, energía, cantidad de agua que has bebido, etc. Lo que sí me gustaría probar es a unirlo a un calendario lunar. Quiero ver las semejanzas y ver si afecta a mi ciclo menstrual. Quizá sí tenga que ver o quizá me lleve un chasco. 

Sé que nos han enseñado a odiar nuestro ciclo y a tenerle asco, pero probad a verlo de forma positiva durante un mes o dos y ya veréis. Sin duda el patriarcado nos ha hecho mucho daño, pero en esto es imperdonable. ¡A por ello!

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